Cuando hablamos de modelos de negocios, nos referimos al modo en el que un negocio o empresa va a funcionar. Y, probablemente te has llegado a preguntar: ¿Tengo en mente iniciar un negocio, pero no sé en cuál área voy a desarrollarme? ¿O ya estoy en el mercado pero desconozco a qué rubro pertenece? ¿Significa lo mismo el término “emprendimiento” del que tanto hablan los demás? Hoy por hoy, el emprendimiento se ha percibido como ese camino de vida para la creación de valor y bienestar en las sociedades, con el propósito de impactar positivamente en nuestro entorno. En un lenguaje más técnico, se conoce como emprendimiento a aquel proceso innovador que integra diversas acciones para proporcionar soluciones a los problemas de las personas.
Sin embargo, es importante reconocer que cada negocio debe enfocarse en una actividad específica, y de esa forma lograr solucionar una necesidad en particular. Del mismo modo, los tipos de emprendimiento son muy distintos, pero todos tienen algo en común, el objetivo de crear soluciones innovadoras y eficientes para solucionar los problemas de las personas y así satisfacer sus necesidades. En análisis, en muchos casos se habla de emprendimiento como una palabra genérica, sin embargo, en realidad, podemos analizar este concepto para revisar el concepto de emprendimiento de acuerdo a su impacto. Por esta razón, en este artículo explicaremos los diferentes tipos de emprendimiento. A continuación descubre los 4 más importante de ello y su principal impacto económico en la sociedad:
– EMPRENDIMIENTO PEQUEÑOS
En este rubro clasifican las pequeñas empresas, bajo la dirección del emprendedor como el propio dueño, donde su número de empleados es muy pequeño, son las más rentables para cubrir las necesidades básicas de una familia.
Este tipo de negocio lo podemos percibir en calles o avenidas de nuestras ciudades, son apenas rentables para sus dueños. En las personas con un determinado conocimiento o habilidad que producen un bien artesanal o brindan un servicio, por ejemplo: producción de mermelada casera, servicio de estética a domicilio. Son considerados exitosos si logran mantener las necesidades básicas de sus fundadores. Su impacto económico es limitado, pero valioso por aportar a la subsistencia de sus fundadores. Algunas, crecen orgánicamente para transformarse en Emprendimientos Locales.
– EMPRENDIMIENTOS CON ALCANCE LOCAL
Estos tipos de emprendimiento tienen un tipo de enfoque principalmente de un alcance de una o múltiples ciudades dentro de un país. Generalmente, son empresas que inician de partida con un enfoque local, o empresas pequeñas que a raíz de su éxito crecen y pasan a un nivel nacional. Aportan a la economía, contratando colaboradores en múltiples localidades.
La financiación de estas empresas viene a través de un crecimiento orgánico (vía la reinversión de ganancias), o un aporte inicial de socios para su creación.
Generalmente, tienen un crecimiento sostenido anual, pero no acelerado. Típicamente, este tipo de emprendimientos no busca inversión externa luego de su estructuración inicial, y busca alcanzar un retorno a sus accionistas mediante pago de dividendos y utilidades.
Tienen un impacto importante en las economías locales, pues pagan impuestos, generan empleos y pagan dividendos a sus socios. Son un valioso motor de la economía local.
– EMPRENDIMIENTOS ESCALABLES
“Cada día son más los emprendedores en todo el mundo que buscan desarrollar negocios que apunten a la escalabilidad”. Es decir, negocios que con muy poca inversión logran obtener grandes beneficios económicos en el tiempo. Típicamente tienen un elemento de innovación o un componente de transformación digital en el ADN o diferenciación de la empresa.
Como por ejemplo lo son Netflix, Chicfy o Spotify; estas empresas a pesar de dedicarse a comercializar servicios completamente distintos, todas tienen algo en común: son empresas “altamente” escalables. En el ámbito de América Latina podemos mencionar ejemplos como Mercado Libre, Nubank y Rappi entre otros.
Tienen la visión de generar grandes niveles de crecimiento, gracias a la innovación y estrategias implementadas. Los negocios tecnológicos, relacionados con el desarrollo de aplicativos y negocios “de comercios electrónicos”, también los puedes tomar de referencia como ejemplo de empresas que se enfocan en el concepto de escalabilidad. Generalmente, su inversión viene de socios externos en múltiples “rondas” de inversión. Y su principal enfoque es el valor de la empresa y sus ventas. Con un foco regional y global. Si son exitosas, su valor e impacto económico es tanto local como regional. Generan pago de impuesto y plazas de trabajo de manera amplia y fortalecen el ecosistema emprendedor alrededor de las mismas.
– EMPRENDIMIENTOS SOCIALES
Abarca las actividades emprendedoras e innovadoras de organizaciones sin fines de lucro, personas ligadas a actividades cívicas, y empresas o negocios cuyos programas tienen un aspecto de beneficio social. Este modelo integra tanto el beneficio social como los principios de negocios sostenibles. Se enfoca específicamente en resolver algún problema en su sociedad o comunidad mediante un sistema innovador. En este sentido, la figura de emprendedor social desea ejecutar sus ideas para que las personas puedan tener una mejor calidad de vida en cualquier parte del mundo.
Es importante destacar, que el emprendimiento social abarca a empresas o negocios que tienen un claro objetivo social. Esta tendencia refleja la actividad emprendedora como un tipo de entidad que se ocupa primero de la misión social y después de las ganancias; son las compañías o sociedades de responsabilidad limitada de bajas ganancias. Generalmente, son empresas sin fines de lucro; A pesar de que no generan una rentabilidad económica por no ser su enfoque, el impacto social que tiene impacta muchas personas y crea plazas de trabajo.
En conclusión, en un rápido análisis del concepto emprendimiento, el mismo tiene una gama de impactos dependiendo del tipo de emprendimiento. Todos con un relevante rol, pero con diferentes focos de alcance e impacto económico.