Empresas como Virgin, Ford y Accenture tienen algo en común: han realizado inversiones tipo Corporate Venture Capital (CVC). Estas inversiones corporativas consisten en un modelo generado en las empresas para canalizar capital para desarrollar startups.
Si bien el Corporate Venture Capital o Círculo Virtuoso de Capital no es una idea nueva, cada día cobra más protagonismo en materia de innovación corporativa, dado que como cualquier fondo busca generar rendimientos financieros.
Cuando el modelo CVC se aprovecha, logra romper los estereotipos de la Cultura Corporativa, posicionándose como un elemento clave para que las empresas impulsen la consolidación de nuevos negocios que nacen de ideas renovadas, diferentes, un equipo lo suficientemente sólido para la diversificación de la cartera de negocios.
El Corporate Venture Capital permite combinar la solidez, experiencia y capital de una empresa con capacidad de invertir junto a la audacia, la pasión y carácter flexible de un negocio en plena ebullición tipo startup.
Así es como el Círculo Virtuoso de Capital ya se ha convertido en un generador de innovación dentro de las organizaciones. En definitiva, facilita el intercambio de experiencias y conocimientos que poseen las grandes empresas junto a la innovación, agilidad y talento de una startup persiguiendo un mismo fin.
¿Y cómo funciona en Latinoamérica?
Nuestra región aún se encuentra aventurándose en estos modelos de innovación pero ya existen algunas evidencias del poderoso impacto de CVCs en la región.
Por ejemplo, un estudio realizado entre la Amexcap y el Tecnológico de Monterrey, reflejado en un artículo en la Business Insider México, expuso el importante papel que ha tenido el CVC en el crecimiento económico.
Al menos 44% de las empresas en el ecosistema mexicano cuentan con financiamientos provenientes de algún fondo económico, debido a esa diversificación de inversiones y relaciones que ha traído como resultado el posicionamiento del Corporate Venture Capital.
La encuesta en México sobre las CVCs consistió en 34 preguntas a 19 corporativos, de los cuales se estima que al menos 29% realiza de cero a dos inversiones por año; mientras que 65% realiza de tres a cinco inversiones anuales; y 6% realiza más de 10 inversiones anuales.
Sin duda, es un momento crucial para invertir a través de modelos que rompan el molde e invitan a innovar en serio. ¿Qué opinas de las CVCs?