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Estos puntos demuestran que puedes ser como Elon Musk o Steve Jobs

Elon Musk ha dicho famosamente: “Creo que la gente común puede elegir ser extraordinaria”. Por supuesto, Musk no es una persona común. Él es excepcionalmente inteligente. Como señala Ashlee Vance en la biografía que escribió sobre Musk, el hombre puede realizar cálculos físicos complejos en su cabeza en tiempo real y puede absorber rápidamente grandes cantidades de información con una capacidad de recuerdo casi perfecta. Pero el genio no es un ingrediente requerido ni garantizado para hacer invenciones innovadoras que cambien al mundo. Un examen detallado de la vida de Musk, así como de las vidas de otros innovadores de alto impacto, revela algunas estrategias clave que usan y que tú puedes imitar para convertirte en un emprendedor de gran éxito.

1. Cultiva una gran ambición

Una gran parte de lo que motiva a innovadores como Musk, Nikola Tesla o Steve Jobs, es tener una gran meta idealista. Ninguno de estos innovadores llegó a una industria pensando “¿cómo puedo ampliar de forma incremental los productos existentes?” o “¿qué producto tiene una alta probabilidad de generar ganancias?” En su lugar, se centraron en cómo podrían revolucionar algún aspecto de la vida humana. Este objetivo a menudo era más importante para ellos que la comodidad, el ocio o incluso la familia y la salud. Un objetivo idealista puede proporcionar una motivación intrínseca intensa, lo que te permite realizar un gran esfuerzo. Además, si es algo que consideras honorable o noble, tendrás una forma de defensa del ego que te ayuda a persistir incluso frente a la crítica o el fracaso. Parte de por qué Musk tiene tantos seguidores, por ejemplo, es que sus objetivos de colonizar Marte y mover la industria automotriz a la energía renovable resuenan con los ideales de muchas personas.

2. Cree que puedes superar todos los obstáculos y lograr tus objetivos

Suena como algo que podrías leer en un póster inspiracional con un gato, pero otra característica que une a Musk, Tesla, Jobs, Marie Curie, Albert Einstein y otros innovadores es una fe intensa en su propia capacidad para superar obstáculos. Esta “autoeficacia”, como la definen los psicólogos, puede motivar a la gente a asumir tareas que otras personas considerarían imposibles, y atenerse a ellas incluso cuando las cosas se ponen difíciles. Cuando Musk anunció su intención de crear cohetes reutilizables, los veteranos de la industria espacial dijeron que era imposible, pero Musk se mantuvo fríamente seguro y respondió que pensaba que podía hacerlo. Ese “Creo que puedo hacerlo” es la clave: la fe de Musk en su habilidad para alcanzar cualquier objetivo y superar cualquier obstáculo es uno de los aspectos más importantes de su personaje  y que lo ha llevado a ser un innovador más grande que la vida.

Dean Kamen, inventor de la primera máquina portátil de diálisis deriñón, la primera bomba portátil de infusión de medicamentos del mundo, el Segway y la máquina Slingshot que puede convertir cualquier cosa húmeda en agua potable también muestra esta creencia. Cuando la gente le dijo que su objetivo de hacer una silla de ruedas que pudiera balancearse sobre dos ruedas era imposible, según una entrevista con Esquire, dijo: “No me digas que es imposible … dime que no puedes hacerlo … Díganme que nunca se ha hecho”. Posteriormente creó la silla de ruedas iBot que, entre otras cosas, puede subir escaleras. La autoeficacia excepcional puede ayudar a las personas a asumir enormes desafíos y apegarse a ellos sin importar cuán difícil se vuelvan.

3. Desafia las suposiciones y abrazar tu propia rareza

Otra gran parte de por qué Musk, Einstein y Jobs fueron capaces de ser tales pensadores originales es porque tenían una sensación de “separación” con el resto de la humanidad, un sentimiento de ser diferente o desconectado de la multitud, lo que los liberó para rechazar la sabiduría y las suposiciones convencionales que limitan a otros. Einstein escribió sobre esto extensamente en un ensayo titulado “El mundo como yo lo veo”en el que decía:

“Tengo mi propio andar y nunca pertenecí a mi país, mi hogar, mis amigos o incluso a mi familia más cercana con todo mi corazón. Frente a todos estos lazos, nunca he perdido una obstinada sensación de desapego, de la necesidad para la soledad, un sentimiento que aumenta con los años”.

Cuando Musk era un niño, era de baja estatura, nerd y frecuentemente víctima del bullying. Tenía pocos amigos y era tan introvertido que su familia pensó que podría ser sordo. Sin embargo, al igual que otros innovadores de gran impacto, era un lector insaciable que consumía todos los libros de la biblioteca local e incluso memorizaba largos folletos de la enciclopedia y se enseñaba a sí mismo a programar computadoras. Más tarde aprendió por cuenta propia todo lo que pudo de la ciencia de cohetes. Muchos innovadores en serie tienen esta tendencia a trabajar por su cuenta y ser autodidactas. Esto les ayuda a formar sus propias creencias sobre cómo funciona el mundo y qué se puede hacer, en lugar de dejar que otros lo definan por ellos.

Fuente: Entreprenuer

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